La Guardia Civil desarticuló en mayo pasado una red criminal que había logrado estafar a 70 personas un total de millón y medio de euros por el método de la estafa del amor. Las víctimas eran seducidas por las redes sociales y engañadas tras otorgar su confianza. Es un fraude muy común en internet, señala Raquel Herrero, responsable del Grupo de Delitos Económicos de la Guardia Civil. Y va en aumento. La generalización de las redes sociales y las plataformas de mensajería las convierte en un caldo de cultivo para este tipo de fraudes, que se caracterizan por apelar a lo personal, a las necesidades, aspiraciones y vulnerabilidades de cada individuo.
El amor, como sentimiento más universal, es la llave de entrada para los estafadores: estamos indefensos cuando nos enamoramos. Pero también se aprovechan cuando buscamos un empleo desesperadamente, por eso los defraudadores lanzan ofertas de trabajo falsas o anuncios con los que enriquecerse invirtiendo en negocios punteros o en la criptomoneda de moda.
“Los timos se han adaptado a la nueva realidad social y a la herramienta globalizadora que es internet”, explica Herrero. Antes había que ir de puerta en puerta o con un anuncio en la prensa, ahora se puede contactar a cientos de miles de personas con un clic. Así, un estafador en Costa de Marfil puede engañar a personas de Los Ángeles, a Sídney, pasando por Zaragoza. “Antes se llamaba picaresca, ahora ingeniera social”, describe Manuel Sánchez Rubio, director del máster en Ciberseguridad de UNIR. Por ingeniería social el profesor se refiere a las técnicas que emplean los estafadores para conocer a los usuarios de la red que quieren embaucar, ya que cada estafa apela a personas con unas vulnerabilidades concretas. “No caen las mismas personas en una estafa amorosa que en una de inversión”, añade el profesor. Explicamos a través de casos reales en qué consisten y cómo intentar no caer en estos fraudes.
La estafa del amor, una relación romántica, tóxica y falsa
Vicente Ventura, de 60 años, vecino de Barcelona, fue víctima de la estafa del amor, fraude por el que perdió 25.600 euros, de acuerdo con su testimonio difundido en medios de comunicación. Conoció a una mujer alemana de mediana edad a través de una red social de citas. Ella le contó que vivía en Madrid, que estaba viuda y que se dedicaba a la venta al por mayor de joyas. Tras varios días de intercambio de mensajes, le contó que se marchaba a Qatar a realizar una venta por valor de 12 millones de euros y que, al regresar, pasaría por Barcelona para pasar unos días con él. Al llegar a Qatar, ella le avisa de que su móvil se ha averiado y se ha comprado otro, pero que tiene problemas para activarlo. La mujer le cede las claves de su cuenta en un banco alemán para que Ventura haga una transferencia de la cuenta al hotel con la que pagar el hospedaje. Ventura observa que ella cuenta con un saldo de más de 600.000 euros, por lo que no desconfía.
En los días posteriores, la mujer le solicitó otra transacción. Al realizarla, Ventura se equivocó al introducir el pin y se bloqueó la cuenta, de mera que se sintió en la obligación de buscar una solución y decide pagar de su bolsillo las siguientes noches de hotel. Gasta 3.000 euros y solicita un crédito de 22.000 euros por internet para cubrir otros gastos, que le envía a través de un prestamista. Un día después, la estafadora vuelve a solicitarle más dinero, 45.000 euros en esta ocasión, en concepto de los impuestos que debía pagar por la venta realizada. Es entonces cuando Ventura entiende que algo no cuadra y que podría estar siendo víctima de una estafa. Decide en ese momento presentar una denuncia ante la Policía.
Cómo identificar la estafa del amor
Así embauca el estafador del amor a su víctima
Perfil de la víctima
- Persona mayor de 40 años, lo que asegura que tenga cierta solvencia económica
- Solitaria, con un entorno familiar y social reducido, que suele encontrarse en momentos emocionalmente vulnerables, como soledad o depresión
- Poco familiarizada con el uso de la tecnología, pero con acceso a aplicaciones y redes sociales
CÓMO PREVENIRLO
Proteger tus perfiles en redes sociales. Conviene mantener las redes sociales en modo privado, siempre que sea posible y minimizar la información que se proporciona, como números de teléfono, direcciones de correo electrónico, entre otros. Tampoco compartas esta información con personas que solo se conocen en línea.
Verifica su perfil. Antes de proporcionar datos personales o enviar dinero, conviene hacer una búsqueda por internet. Si se dispone de una imagen del supuesto amante, se puede compartir en Google Images y ver si en los resultados aparecen otras personas bajo ese nombre.
Analizar su comportamiento. Un signo de que se puede tratar de una estada es si evita continuamente las videollamadas y prefiere las comunicaciones escritas.
El fraude del empleo, una oferta perfecta cuando más se necesita
Dos vecinos de Jerez de la Frontera (Cádiz) recibieron a finales de 2024 un correo electrónico con una oferta para trabajar en una tienda de una conocida cadena de material deportivo en la misma ciudad andaluza. Ambos respondieron a la propuesta y el estafador, que se hacía pasar por el departamento de recursos humanos de la cadena, solicitó previamente el pago por internet de diversas cantidades de dinero en concepto de gestiones administrativas. El dinero se les devolvería al ser contratados. Los vecinos enviaron 1.580 euros. Los trámites nunca se realizaron, según reportó la Policía Nacional y recogieron los medios de comunicación.
La Policía detuvo a la presunta responsable de la estafa en diciembre, una mujer de la localidad que se dedicaba a insertar anuncios falsos en páginas especializadas, así como al envío masivo de correos electrónicos en los que se hacía pasar por directiva de la cadena de tiendas para aprovecharse, como señala la Policía, de personas que se encuentran en paro o que buscan un empleo mejor remunerado. Los expertos señalan que los estafadores utilizan las redes sociales, las plataformas de mensajería y los portales de empleo para emitir sus ofertas fraudulentas y, aunque en este caso proviene de la misma zona, el estafador puede estar en otro país o incluso en otro continente.
Cómo identificar una oferta de trabajo fraudulenta
A través del correo electrónicoLa dirección de correo electrónico imita a la de la empresa que suplantan, aunque no es exactamente igual
Redacción deficiente que incluye faltas de ortografía, aunque, gracias a la inteligencia artificial cada vez imitan mejor las ofertas de trabajo reales
A través de WhatsAppLos estafadores buscan dinero, pero también datos personales, como el DNI, para ejecutar otros fraudes como pedir créditos a nombre de la víctima
A través del portal de empleoLos estafadores también ofrecen empleos que requieren poca cualificación
Basados en ejemplos reales.
Perfil de la víctima
- Personas que provienen de entornos de bajos recursos, sin formación académica que les permita acceder a empleos más cualificados
- Personas con necesidad económica apremiante, lo que aumenta su vulnerabilidad ante este tipo de ofertas
CÓMO PREVENIRLO
Ninguna empresa solicita dinero a los candidatos durante un proceso de selección.
Ninguna empresa solicita datos personales antes de ser contratado
No responder a una llamada automática en nombre de una empresa de recursos humanos. Cada vez es más común que los estafadores contacten por teléfono a través de una grabación, de la que pueden obtener información de la víctima
Llamar directamente a la empresa para consultar si esa oferta es real, en caso de duda
Reportar una oferta sospechosa. Plataformas como Infojobs cuentan con un botón en cada oferta para reportar. La empresa abrirá una investigación. En caso de ser un fraude, se evitará que otros caigan
Estafa de inversión, la ilusión de hacerse millonario fácilmente
Un vecino de León decidió realizar una pequeña inversión en criptomonedas por recomendación de un amigo sin tener conocimientos del mundo de las inversiones. Efectuó el pago a través de una plataforma y posteriormente obtuvo beneficios, según reportó al Instituto Nacional de Ciberseguridad (Incibe). Tras la inversión, unos supuestos brokers se pusieron en contacto con él para proponerle nuevos movimientos en otras plataformas. Para ello, le solicitaron que instalara una aplicación para acceder en remoto a su equipo, de manera que pudieran ayudarle en el proceso. Dado que la primera inversión con ellos había sido fructífera, continuó.
Para sus siguientes objetivos entregó una cantidad mucho mayor que la inicial. Todo marchaba bien, creía al comprobar a través de una página web que sus ganancias crecían. Un día intentó recuperar sus inversiones junto a las ganancias, pero no pudo. Contactó con los brokers por los canales por los que se habían comunicado anteriormente sin obtener respuesta. Ahí empezó a sospechar de que se trataba de una estafa. En ese período otro supuesto broker contactó con él, asegurándole de que era un profesional que se dedicaba a recuperar el dinero de víctimas de estafas en inversiones, pero intuyendo que se trataba de otro fraude, decidió no contratar sus servicios.
Cómo identificar un anuncio de inversión fraudulento
Así embaucan a sus víctimas, paso a paso
Perfil de la víctima
- Hombre
- Familiarizado con el uso de tecnologías y con interés en el mundo de la inversión y las criptomonedas
- Con necesidades económicas o que buscan obtener dinero rápido Sin demasiados medios para litigar legalmente por su dinero tras la estafa
CÓMO PREVENIRLO
No confiar en plataformas que no estén registradas en la Comisión Nacional del Mercado de Valores. Para verificar si está registrada pueden llamar al 900 535 015 o a través del canal de denuncias.
No confiar en anuncios que utilizan a celebridades. Recientemente se ha desarticulado una banda que utilizaba la imagen del rey Felipe VI para anunciar sus inversiones.
No instalar aplicaciones en caso de no estar seguro. Los estafadores pueden solicitar a la víctima la activación de una tarjeta monedero y sus credenciales de acceso. Esto se debe evitar, pues se está dando la potestad de usar su cuenta para realizar transacciones.
Guardar todas las comunicaciones, números de teléfono, nombres, cuentas bancarias para elaborar una línea de tiempo, para facilitar la investigación en caso de tener cualquier problema, recomienda Jorge Coronado, Investigador informático y socio fundador de Quantika 14.
Fraude del directivo, cuando obedecer al jefe perjudica a la empresa
Un fraude de suplantación de la identidad propio del mundo empresarial, cada vez más extendido, es el del directivo, explica Manuel Achaques, gerente de ventas de Hornetsecurity, una multinacional dedicada a la ciberseguridad para entornos laborales. En este tipo de estafa, el delincuente se hace pasar por el director general o el presidente de una empresa para engañar a empleados con acceso a fondos o información privada. Para lograrlo, los estafadores realizan una investigación previa basada en técnicas de ingeniería social: analizan redes sociales, noticias, páginas web corporativas, organigramas, relaciones con clientes y proveedores, e incluso realizan llamadas bajo pretextos falsos para obtener datos clave sin levantar sospechas.
Las grandes empresas con mucho personal, donde existen departamentos con funciones muy marcadas y muchas veces sin relación diaria entre ellos son su principal objetivo, asegura Raquel Herrero, responsable del Grupo de Delitos Económicos de la Guardia Civil.
Cómo funciona la estafa
Los estafadores envían una comunicación a un empleado suplantando a un directivo y solicitándole una transacción urgente a una cuenta externa a la empresa o las claves de alguna cuenta. Puede ser a través de un correo electrónico o de una aplicación de mensajería. Pueden hacerlo mediante las propias cuentas del directivo –tras haber robado las credenciales anteriormente- o a través de una cuenta falsa que la imite.
Los estafadores han realizado un estudio previo para conocer quién tiene capacidad para efectuar transferencias, así como los hábitos de los directivos, con el fin de elegir el momento más propicio para la estafa. “Cuando están de vacaciones, en un avión, también en contextos de negociaciones con otras empresas…”, enumera. De esta manera, no es posible realizar una segunda verificación que se recomienda en estos casos. Cada vez es más habitual el ataque de doble vector, es decir, que además del mensaje, los estafadores llaman al empleado replicando digitalmente la voz del directivo. “Con herramientas muy baratas es fácil duplicar la voz con los audios y vídeos que haya publicados en la red”, completa el experto de Hornetsecurity. Esta técnica, basada en inteligencia artificial, marca una evolución frente al clásico fraude del directivo hacia formatos más sofisticados donde entra en juego el deepfake, es decir, la suplantación de identidad mediante la imagen en movimiento.
En algunos fraudes recientes, los delincuentes han llegado a recrear videollamadas en las que también imitan a otros miembros del equipo. Usan deepfakes para generar rostros y voces de empleados de la empresa, haciendo que parezca una reunión legítima. La víctima, al ver caras conocidas y sentir una supuesta validación colectiva, baja la guardia y accede con más facilidad a realizar la acción solicitada.
El banco te ayuda a identificar las amenazas
Un usuario concienciado está mejor preparado para no caer en una estafa digital, especialmente cuando lo que está en juego es su dinero. Banco Santander ofrece a sus usuarios y a la ciudadanía en general recursos en forma de campañas de concienciación centradas en aspectos clave de la seguridad digital como la creación de contraseñas robustas, entre otras. También publican a través de su página web oficial artículos con recomendaciones prácticas para disfrutar con confianza de la vida en línea.
Si alguna comunicación por parte del banco genera dudas, Santander ofrece canales oficiales para resolverlas: los SMS sospechosos se pueden enviar al 638 444 542; los correos dudosos, a phishing@gruposantander.es.También se pueden realizar consultas sobre estos temas en la superlínea (915 123 123), en las propias oficinas, o desde el Centro de Ayuda de la aplicación o la banca online, disponible 24 horas.
Banco Santander dispone de un canal de WhatsApp directo para clientes. Una comunidad a la que se pueden unir para recibir ciberconsejos, novedades y alertas sobre este tipo de estafas y pautas para identificar mensajes sospechosos.
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La estafa del amor y otros fraudes de hoy
Créditos
Coordinación editorial: Juan Antonio Carbajo y Francis Pachá
Redacción: Javier A. Fernández
Diseño: Juan Sanchez
Desarrollo: Rodolfo Mata
Coordinación de diseño: Adolfo Domenech
Agradecimientos: Jorge Coronado, de Quantika 14