Carlos Alcaraz anunció este miércoles el fin de su vínculo profesional con Juan Carlos Ferrero, el técnico que le ha guiado hacia la cúspide del tenis mundial y con el que trabajaba desde 2018. Entonces, el preparador valenciano (45 años) se decantó por el proyecto que le proponía el agente del murciano (22), en vez de asociarse con tenistas de primera fila, espacio que ahora ocupa Alcaraz. “Gracias por haber convertido los sueños de niño en realidades. Empezamos este camino cuando apenas era un chaval, y durante todo este tiempo me has acompañado en un viaje increíble, tanto dentro como fuera de la pista. He disfrutado muchísimo de cada paso contigo”, apuntó el número uno por medio de sus redes sociales.
Alcaraz difundió el mensaje a media mañana —coincidiendo con su primer entrenamiento sobre pista de la pretemporada, tras las pruebas médicas efectuadas el martes— y sus buenas palabras encontraron enseguida correspondencia en el comunicado de Ferrero. “Despedirse nunca es fácil, y menos cuando detrás hay tantas experiencias compartidas. Hemos trabajado duro, crecido juntos y compartido vivencias inolvidables. Quiero dar las gracias por el tiempo, la confianza, el aprendizaje y, sobre todo, por las personas que me han rodeado durante todo este viaje”, expresó el entrenador, quien a su vez dejó una frase que ofrece una lectura entre líneas: “Me hubiera gustado seguir”. Es decir, la voluntad de separarse ha partido del murciano, que ansía nuevos estímulos de cara a la temporada que se avecina.
Una vez finalizado el curso de 2025 y habiéndose oxigenado con unas vacaciones en Miami, Alcaraz comenzó esta semana la preparación en Murcia, donde estos días ha estado acompañado en las instalaciones de la Real Sociedad Club de Campo por varios titulares de su equipo; entre otros, el preparador físico y fisioterapeuta Juanjo Moreno, el preparador Albert Lledó y el técnico Samuel López. No aparecía en la foto, sin embargo, Ferrero. Y así será de aquí en adelante, por lo que el valenciano no volará a Australia próximamente —el Open de Australia comienza el 18 de enero— y será López quien asuma a partir de ahora la dirección, según pudo confirmar este periódico.
La noticia genera un fuerte impacto mediático, puesto que Alcaraz venía de firmar su mejor campaña desde que accediera a la élite —con 71 victorias en 80 partidos, traducidas en ocho títulos— y, por encima de todo, de haber obtenido la tan ansiada “consistencia” que buscaba y se le demandaba. Convertido en un competidor total, capaz de imponerse en pista dura, tierra batida y hierba, sellará el año en lo más alto del ranking —por segunda vez en su carrera— y convencido de que su mejor versión está por llegar. A diferencia de lo sucedido hasta ahora, el orfebre no será Ferrero, en su día número uno (2003) y tutor a lo largo de esta etapa de ascensión, progresión y consolidación.
Con él, Alcaraz ha conquistado dos veces Roland Garros (2024 y 2025), otras dos Wimbledon (2023 y 2025) y también el US Open (2022), espoleta definitiva de un trazado que comenzó a coger forma en 2018, poco después de que el entrenador finalizase su relación profesional con el alemán Alexander Zverev. Entonces se desempeñaba prácticamente como un padre, luego como un amigo (que le descubrió la cultura de gimnasio y el golf) y, en última instancia, como instructor de élite. Pese al contraste de caracteres, muy risueño uno y frío el otro, ambos siempre han enhebrado bien y la conjunción ha resultado un éxito plasmado desde todos los ángulos: deportivo, afectivo y mercadotécnico. Hoy por hoy, no hay tenista más admirado, disfrutado ni reclamado que Alcaraz. Pura frescura.
Ser profesional
“Al final intentamos no pensar de aquí a 15 años, cuando tenga 37, sino que se trata de ir año a año”, decía recientemente, durante un encuentro con este periódico en Turín. Ese día, antes de la entrevista bromeaba en el vestuario con Ferrero, que en su momento experimentó una explosión similar —héroe en la Davis de 2000, en el Sant Jordi— y que, una vez colgada la raqueta y sentado en los banquillos, descartó dirigir a otra estrella para enrolarse en una aventura con un todavía adolescente que ya brillaba y anticipaba muy convencido: “Quiero ser el número uno”. Hizo cumbre Alcaraz más rápido que nadie y le profesó el valenciano siempre una gran admiración: “Lo puede hacer todo”.
Si Ferrero fue un competidor de laboratorio, muy metódico y trabajador hasta el extremo, muy cerebral, Alcaraz responde más a la genialidad propia de esa estirpe única de los elegidos. Así que después de haber adoptado la rigurosidad, la metodología y el aprecio por el detalle de su mentor, ese mantra de “aprender a ser profesional” que le reclamaba este, el rey actual del circuito aplica un giro de tuerca en busca de nuevos horizontes, con la pretensión de mantener la línea triunfal —24 trofeos de la mano en la ATP— y examinarse en una dimensión diferente: la sombra paternalista ya no es imprescindible. “Llegan tiempos de cambio para los dos, nuevas aventuras y proyectos”. Más concienciado y con la teoría de la continuidad ya aprendida, Alcaraz abre otro ciclo encabezado, de partida, por el gesto amable de López.
Este último, de 55 años, fue un jugador de perfil modesto —retirado a los 23, tras desfilar por el circuito nacional— que vio crecer a Alcaraz en la academia de Villena (Alicante) e ingresó oficialmente en el equipo del tenista a finales de 2024. Desde esa fecha actuaba como complemento en el área técnica, aunque ha ido ganando peso específico y ha colaborado de manera decisiva en varios retoques clave; entre ellos, el renovado saque que le ha aportado un plus. Ese año ya acompañó en solitario al tenista en la experiencia de Australia —debido a una operación de rodilla de Ferrero— y posteriormente lo hizo en varias citas reseñables. López moldeó e impulsó antes la prolífica trayectoria del gijonés Pablo Carreño —ganador de un bronce olímpico— y se enfrenta hoy a un reto superior: sostener a un genio.
| LOS ÉXITOS DEL TÁNDEM | Año | Categoría | Superficie |
|---|---|---|---|
| Umag (Croacia) | 2021 | ATP 250 | Tierra |
| Río de Janeiro | 2022 | ATP 500 | Tierra |
| Miami | 2022 | Masters 1000 | Dura |
| Barcelona | 2022 | ATP 500 | Tierra |
| Madrid | 2022 | Masters 1000 | Tierra |
| US Open | 2022 | Grand Slam | Dura |
| Buenos Aires | 2023 | ATP 250 | Tierra |
| Indian Wells | 2023 | Masters 1000 | Dura |
| Barcelona | 2023 | ATP 500 | Tierra |
| Madrid | 2023 | Masters 1000 | Tierra |
| Queen’s | 2023 | ATP 500 | Hierba |
| Wimbledon | 2023 | Grand Slam | Hierba |
| Indian Wells | 2024 | Masters 1000 | Dura |
| Roland Garros | 2024 | Grand Slam | Tierra |
| Wimbledon | 2024 | Grand Slam | Hierba |
| Pekín | 2024 | ATP 500 | Dura |
| Róterdam | 2025 | ATP 500 | Dura (indoor) |
| Montecarlo | 2025 | Masters 1000 | Tierra |
| Roma | 2025 | Masters 1000 | Tierra |
| Roland Garros | 2025 | Grand Slam | Tierra |
| Queen’s | 2025 | ATP 500 | Hierba |
| Cincinnati | 2025 | Masters 1000 | Dura |
| US Open | 2025 | Grand Slam | Dura |
| Tokio | 2025 | ATP 500 | Dura |