El árbitro serbio de la Euroliga Uros Nikolic ha sido detenido este miércoles en un gran operativo policial en Belgrado bajo sospecha de pertenecer a un grupo de crimen organizado acusado de cometer graves delitos, según ha informado este jueves la televisión pública RTS y el portal de noticias Blic.
En el registro del apartamento Nikolic, y siempre según la información de estos medios, la policía serbia encontró cerca de 250.000 euros en efectivo, varios lingotes de oro y relojes de lujo. El colegiado, de 39 años, ha sido detenido junto con otras nueve personas y este jueves se espera que sea interrogado en la Fiscalía para la Delincuencia Organizada del país.
“Se sospecha que [Nikolic] es el apoyo financiero de las actividades del clan de Vracar”, ha advertido el ministro de Policía, Ivica Dacic, en el informativo matutino de este jueves en el servicio público RTS. El denominado clan de Vracar es un grupo criminal de Belgrado, activo al menos desde 2018, acusado de delitos graves como asesinatos, intentos de homicidio, tráfico de drogas, posesión de armas y lavado de dinero.
Nikolic pita en la Euroliga desde 2019 y su trayectoria incluye la participación en la Final Four del torneo en las ediciones de 2020/2021 y 2023/2024, donde arbitró los encuentros por el tercer puesto entre el Milan y el CSKA en 2021, así como el Olympiacos y el Fenerbahce en 2024. En la segunda jornada de la presente temporada, Nikolic dirigió el pasado 2 de octubre el partido entre el Real Madrid y el Olympiacos en el Movistar Arena de Madrid, donde los blancos se impusieron 89-77. Además, Nikolic ha arbitrado otros tres partidos de Euroliga en lo que va de curso: el Panathinaikos-Bayern, el Hapoel Tel Aviv-Maccabi Tel Aviv y el Dubai Basketball-Bayern de Múnich.
A expensas de tener más noticias al respecto, la Federación Serbia de baloncesto (KSS) ha decidido supsender a Nikolic de manera indefinida.