La Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid afirma que el resultado de la inspección abierta en el hospital de Torrejón es que todo funciona perfectamente. “Por los datos que constan en la Consejería nunca hubo sospecha de malas prácticas”, asegura.
Tras las malas prácticas reveladas por EL PAÍS con los audios del consejero delegado de Ribera Salud, la Sanidad madrileña había enviado un equipo multidisciplinar al centro para realizar unas pesquisas, que han determinado que “nunca se ha recibido queja” y que “los datos de listas de espera son inmejorables, muy por debajo de la espera en la Comunidad de Madrid”.
Para la Consejería, hay una explicación clara de lo sucedido: “Rencillas internas no pueden poner en duda la calidad de la Sanidad de la Comunidad de Madrid”.
Además, se asegura que en el hospital “han ampliado plantilla” y actividad. “No obstante, sigue la inspección”, asegura Sanidad en una nota enviada a los medios. “Con respecto a la reutilización de material”, en referencia a la información adelantada este viernes por este periódico, la Comunidad ha enviado un comunicado a última hora de la tarde de este viernes para asegurar que “no existe evidencia que indique reutilización de productos sanitarios de un solo uso”.
La conclusión llega, explican, tras la inspección de un equipo de técnicos de la Dirección, que se han desplazado al centro “para con el fin de verificar de manera objetiva los registros de la central de esterilización, el material almacenado en la unidad de cardiología-hemodinámica, y los residuos y zonas de almacenamiento”, además de reunirse “con los responsables de Medicina Preventiva, Cardiología-Hemodinámica y Esterilización”.
La Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid convocó de urgencia el miércoles a la cúpula directiva del hospital de Torrejón y se comprometió a adoptar “todas las actuaciones y controles que pudieran corresponder”.
El departamento que dirige Fátima Matute trasladó esta información tras publicar el diario EL PAÍS un audio de la intervención del CEO del grupo sanitario Ribera, Pablo Gallart, en una reunión con una veintena de mandos del grupo y del hospital celebrada el 25 de septiembre en la que pidió alargar las listas de espera para aumentar los beneficios de la compañía. A pesar de ello, desde la consejería dicen no haber detectado “ningún incumplimiento” de las obligaciones de la empresa que gestiona ese centro hospitalario.