El Senado de la República de Chile aprobó por unanimidad un proyecto que agrava las penas para el delito de secuestro en el país. La iniciativa establece que el delito será sancionado con cárcel que va desde los 5 años y 1 día hasta los 15 años, y se aumentará a presidio perpetuo cuando, además, se cometa homicidio, violación o lesiones gravísimas.
El proyecto también contempla la enmienda que rebaja de 48 horas a 24 horas la duración del encierro o detención. Sin embargo, algunos senadores expresaron sus dudas sobre esta medida, señalando que podría poner en riesgo la vida de las víctimas si no se logra reunir el dinero exigido en ese plazo.
Durante el debate, sonde intervinieron los senadores Felipe Kast, Matías Walker, Francisco Chahuán, José Miguel Durana, José Miguel Insulza, Fidel Espinoza, Kenneth Pugh, Ximena Rincón, Carmen Gloria Aravena, Juan Ignacio Latorre, Claudia Pascual, Luz Ebensperger, David Sandoval, Iván Flores, Jaime Quintana, Juan Castro Prieto e Isabel Allende, los legisladores coincidieron en que se trata de una señal pública y política para disuadir este tipo de delitos y corregir una deficiencia en el tipo penal.
Según datos de las policías, los secuestros aumentaron en un 79,4% en comparación con el año anterior.
“es muy delicado. Si no se junta el dinero en 24 horas, puede morir mucha gente”
Senador José Miguel Insulza
Se reconoció que este es un delito que genera mucho temor y del cual hay que hacerse cargo, y que la nueva norma no es populismo penal, sino una medida necesaria para enfrentar la realidad a la que se está enfrentando el país.
A pesar de ello, algunos senadores reconocieron que las penas más severas no son una solución garantizada para detener la práctica del secuestro en el país, ya que los delincuentes no están pendientes de las penas. No obstante, se llamó a avanzar con una mirada más integral sobre el problema.
En general, el proyecto recibió un cerrado respaldo de los senadores, quienes dejaron en claro que el secuestro es un delito que no puede quedar impune en el país. La iniciativa debe pasar ahora a su tercer trámite constitucional por la Cámara para su aprobación final.