Preparar un delicioso helado casero bajo en calorías y con tan solo tres ingredientes es más sencillo de lo que podrías imaginar. Con un poco de creatividad y los ingredientes adecuados, podrás disfrutar de un postre refrescante y saludable en cualquier momento.
La base de esta receta de helado saludable se compone de ingredientes simples: fruta congelada, edulcorante natural y un toque de líquido. Elige tus frutas favoritas, como plátanos, fresas o mangos, córtalas en trozos y colócalas en el congelador. Una vez que estén bien congeladas, colócalas en una licuadora o procesador de alimentos junto con un edulcorante natural, como miel o stevia, para añadir un toque dulce sin exceso de calorías.
Añade un poco de líquido en esta receta para lograr la consistencia perfecta. Puedes optar por leche de almendras, leche de coco o incluso yogur griego bajo en grasa. Mezcla todos los ingredientes hasta obtener una mezcla suave y homogénea. Si deseas un toque extra de sabor, puedes agregar esencia de vainilla o cacao en polvo sin azúcar.
Una vez que hayas mezclado todos los ingredientes, vierte la mezcla en un recipiente apto para congelador y déjalo reposar durante al menos cuatro horas, o hasta que esté completamente congelado. Durante este tiempo, la mezcla adquirirá la textura y consistencia de un helado cremoso sin la necesidad de una máquina de helados.
Cuando estés listo para disfrutar de tu helado casero bajo en calorías, simplemente saca el recipiente del congelador y deja reposar durante unos minutos para que sea más fácil de servir. Puedes decorar tu helado con frutas frescas, nueces picadas o un toque de chocolate negro rallado.