A partir de este 1 de octubre, los jóvenes profesionales y técnicos de Chile tendrán la oportunidad de postular al Programa SERVICIO PAÍS, una iniciativa que busca promover el desarrollo y la superación de la pobreza en las comunidades más vulnerables del país. Esta convocatoria, que se mantendrá abierta durante todo el mes, permite a los postulantes vivir y colaborar en distintas localidades a lo largo de Chile durante un año, aplicando sus conocimientos para generar un impacto positivo en el territorio.
SERVICIO PAÍS, liderado por la Fundación Superación de la Pobreza, ofrece este año 250 cupos para que los profesionales de diversas áreas y técnicos en disciplinas como administración, finanzas, construcción, agricultura y turismo se sumen a esta experiencia. El objetivo del programa es visibilizar y activar los recursos locales, conectando las necesidades de las personas con nuevas oportunidades.
El programa se despliega en más de 100 comunas en todo Chile, principalmente en aquellas con altos índices de vulnerabilidad y aislamiento. Los participantes de SERVICIO PAÍS trabajan en estrecha colaboración con las comunidades locales, desarrollando proyectos relacionados con áreas tan diversas como el medio ambiente, el acceso al agua, la educación, el turismo, y la infraestructura.
Los postulantes seleccionados deberán residir en las comunas asignadas durante el año de servicio, y en contrapartida, recibirán un aporte económico, seguro de salud y más de 300 horas de capacitación. Estas capacitaciones estarán a cargo de expertos y académicos, lo que garantizará que los profesionales tengan las herramientas necesarias para enfrentar los desafíos de su labor en terreno. El trabajo de los jóvenes de SERVICIO PAÍS es considerado un pilar fundamental en la construcción de un país más equitativo y solidario, como lo destaca la Directora Ejecutiva de la Fundación, Catalina Littin.
En sus 29 años de trayectoria, SERVICIO PAÍS ha contado con la participación de más de 7 mil profesionales, de los cuales cerca del 40% se ha quedado a vivir y trabajar en la región a la que fueron destinados. Esto no solo representa una oportunidad para la descentralización profesional, sino también para el desarrollo sostenible de las comunidades.